En las escuelas Waldorf, una de las celebraciones más esperadas por los niños es la Fiesta del Farol, un evento lleno de significado. La Fiesta del Farol o del Farolillo se celebra durante el otoño, en torno a la festividad de San Martín y es una fiesta en la que los niños participan activamente elaborando sus propios farolillos y preparándose poco a poco durante semanas con canciones y cuentos hasta la llegada de la fiesta. La emoción de prepararlos y luego participar en el desfile nocturno, iluminando la noche con la luz de sus pequeñas creaciones, hace que sea una de los eventos más bonitos de los alumnos Waldorf en todo el mundo.
¿Cuándo se celebra?
La Fiesta del Farol se lleva a cabo en torno al 11 de noviembre, coincidiendo con la festividad de San Martín de Tours, un santo conocido en la tradición europea por su compasión y generosidad, y con antigua historia sobre cómo San Martín compartió su capa con un mendigo en una fría noche de invierno. En la tradición Waldorf, esta festividad simboliza el poder de la luz interior de cada persona, algo que se cultiva y mantiene encendido a pesar de la llegada de las estaciones frías y oscuras.
Origen y significado de la Fiesta del Farol
Su origen se remonta a celebraciones europeas antiguas y cristianas y es una tradición que hoy en día se mantiene viva en otros países de Europa como Alemania, Suiza y Austria. En estos países, la festividad de San Martín tiene profundas raíces y el desfile de los farolillos es una tradición comunitaria donde tanto niños como adultos participan. En otros lugares, como en España, esta fiesta ha llegado principalmente a través de la influencia de las escuelas Waldorf (dado el origen alemán de esta pedagogía) y a través del tiempo ha ido ganando un lugar especial en todas las familias cercanas a las escuelas de esta metodología. En esta época del año, la luz y el calor son escasos, y el farol se convierte en un símbolo de esperanza, calidez y fortaleza interior. En la noche de la celebración, los niños sostienen sus farolillos y cantan canciones especiales, recorriendo parques o jardines con sus familias y maestros. Este desfile ilumina simbólicamente la oscuridad del otoño, recordándonos que siempre podemos buscar nuestra luz interior y compartirla con los demás.
Para los adultos, esta celebración también es especial. Representa una oportunidad para acompañar a los niños en su proceso de descubrimiento de la naturaleza, de las estaciones y de la idea de que cada uno de nosotros posee una luz interior que puede iluminar los momentos más oscuros. Los farolillos, creados con esmero y paciencia, no solo son un arte manual, sino una lección para la vida, simbolizando el calor que nos proporcionamos mutuamente y la luz que podemos brindar a los demás.
Mis recuerdos de la fiesta del Farolillo en “el cole”
Como ex-alumna Waldorf tengo mucho cariño a esta festividad y tengo recuerdos de mi infancia muy bonitos sobre esta festividad en la escuela así que sé por experiencia propia también que es una fiesta que los niños viven con mucha emoción. No hay nada como preparar tu propio farolillo durante días en clase, a la vez que vas viendo que las noches son más largas y que hace cada día más frío al salir de casa. Volver a tu “cole” una tarde otoñal y redescubrir ese espacio de tu escuela pero, esta vez, en la oscuridad, reencontrarte poco a poco por el jardín con tus profesores y tus compañeros a la luz de las velas y poder disfrutar de unas castañas calentitas con todos es una emoción indescriptible y delicada que deseo que muchos niños y familias puedan experimentar alguna vez en su vida.
Y como maestra Waldorf (y como madre) me parece una festividad maravillosa y una oportunidad fantástica para acercar a los más pequeños a los ritmos de las estaciones, hacerles conscientes poco a poco del paso del tiempo y del cambio que se da en la naturaleza a medida que nos acercamos al invierno. La fiesta del farol tiene todos los ingredientes necesarios para ser un recurso pedagógico fantástico: el arte, las manualidades, la recuperación de canciones y cuentos folclóricos y la vida en comunidad.
En LASARA creemos en la importancia de estas tradiciones que fortalecen los vínculos y el sentido de comunidad, y nos encanta inspirar y facilitar toda la información y recursos que podamos para que esta festividad sea cada vez más conocida y podáis aprovechar su significado en casa o en la escuela, así que os dejamos aquí un artículo con un tutorial sobre cómo hacer un tipo de farolillo para los próximos días:
