Los mordedores vienen genial a los bebés para aliviar las molestias del proceso de dentición mientras desarrollan la motricidad y estimulan sus sentidos jugando. Los modelos que tenemos en LASARA están fabricados con caucho 100% natural, siliconas alimentaria, tejidos ecológicos de algodón orgánica y madera de haya sin tratar. Todos los mordedores de caucho y silicona de la tienda son modelos sin agujeros ni hendiduras para evitar que se acumulen bacterias, agua, saliva o suciedad, así que también son aptos como juguetes de agua para la hora del baño. Son fáciles de limpiar, no absorben olores y son de materiales totalmente seguros para uso infantil y libres de sustancias controvertidas como BPA, PVC o ftalatos.
Los mordedores y doudous están pensados para que los bebés los puedan coger fácilmente según sus habilidades de agarre que tienen en los primeros meses de vida.
La principal función del mordedor es calmar las molestias causadas por la salida de los dientes. Al morderlos, los bebés sienten un alivio inmediato de las molestias causadas por el proceso de dentición.
Pasados los primeros meses, el bebé empezará a estimularse la boca y las encías prácticamente con cualquier objeto que vea. Los mordedores son una buena opción como juguete para el niño ya que al tener un tamaño apto su agarre les permitirán experimentar las sensaciones y los estímulos con sus sentidos del gusto, tacto, vista y dependiendo del mordedor, incluso el del sonido con el sonajero interior.
Por todo lo dicho, los mordedores son los juguetes perfectos para los más pequeños y servirán para mantenerlos entretenidos y, además, para que puedan tener objetos aptos para llevarse a la boca con total seguridad por su material y su diseño.
Al estár hechos con materiales totalmente seguros como el caucho y la silicona alimentaria, los mordedores son aptos incluso para bebés recién nacidos, pero comenzarán a cobrar más importancia a partir de que el bebé comience a tener la capacidad de agarrar objetos con sus manos y empiece a mostrar interés por los mismos. Esto suele suceder a partir del 3 o 4 mes del bebé, antes de que comience el proceso de dentición, pero cada bebé es un mundo y va a depender del ritmo de cada uno. A partir del tercer mes de vida es buena opción que tenga mordedores al alcance para que los vea y, poco a poco, a medida que avanza en su desarrollo psicomotriz, pueda cogerlo, llevárselo a la boca y jugar con él.
Los mordedores de caucho y silicona se pueden limpiar sumergiéndolos en agua caliente hervida previamente y esperando de 3 a 5 minutos (nunca poniendo el mordedor en agua que esté todavía en el fuego). En el caso de nuestros doudous, recomendamos lavar las telas a mano o en la lavadora a máximo 30º con detergentes ecológicos (ya que el bebé se llevará a la boca esas telas) y para lavar las partes de madera os recomendamos esta entrada que explica al detalle la limpieza de la madera.
En resumen, los mordedores son juguetes sensoriales estupendos para cualquier momento a partir de que el bebé comienza a agarrar objetos, no solo para la etapa de dentición y, siempre y cuando se mantengan bien limpios, podrán servir de juguetes mucho más allá de la salida de los dientes.
